Castillos infranqueables, soldados aguerridos, dulces muñecas que recibieron mimos y cariños por su deliciosa sonrisa y centenares de coches, camiones de bomberos, cocinas, caballos y carricoches para transportar bebés que superan con creces la edad que aparentan.
Ese es el contenido del Museo del Juguete de Almassora, una muestra expuesta sobre una superficie de casi 300 metros cuadrados en el edificio del Museo que hará recordar al visitante los momentos más felices de su infancia. El museo se ha hecho posible con los fondos donados por la familia Arenós-Agut, que ha resguardado del paso del tiempo centenares de piezas y con las donaciones de otros particulares que han cedido sus tesoros infantiles más preciados.
La colección se crea con un recorrido histórico de los juguetes, desde 1800 hasta la década de los 80 del siglo pasado.
El horario de visita es: viernes de 18 a 20 horas, sábados de 11 a 13 y de 18 a 20 horas y domingos de 11 a 13 horas. Además, para grupos y visitas escolares se ofrecen visitas guiadas de forma altruista con cita previa.